Enfermedades de gallos y gallinas

 5 Enfermedades mas frecuentes  en el gallinero

Enfermedades de gallos y gallinas

    Los gallos y las gallinas, al igual que cualquier otra ave, pueden verse afectados por diversas enfermedades. Es importante estar atento a los signos y síntomas de enfermedades comunes para poder tomar medidas rápidas y adecuadas. A continuación, mencionaré algunas de las enfermedades más frecuentes entre gallos y gallinas:

   La Viruela Aviar

   La viruela aviar es una enfermedad altamente contagiosa que afecta a las aves de corral, incluyendo gallos y gallinas. Es causado por el virus de la viruela aviar, que puede transmitirse a través del contacto directo con aves infectadas, así como por insectos y objetos contaminados.

   Existen dos formas de viruela aviar: la viruela aviar seca y la viruela aviar húmeda.

   La viruela aviar seca 

   Se caracteriza por la formación de lesiones en la piel y en las membranas mucosas de la boca, garganta y ojos de las aves. Estas lesiones pueden aparecer como nódulos o protuberancias de color amarillo o blanco, y con el tiempo se convertirán en costras secas y resistentes. Los gallos y gallinas afectados pueden experimentar dificultad para respirar, disminución del apetito y reducción en la producción de huevos.

   La viruela aviar húmeda 

   Es una forma mas grave de la enfermedad, en la cual se forman lesiones a vesículas llenas de liquido. Estas vesículas pueden romperse y causar úlceras dolorosas en la piel y las membranas mucosas. Las aves afectadas pueden presentar síntomas más graves, como pérdida de peso, dificultad para respirar y problemas oculares.

   La prevención de la viruela aviar implica mantener un buen programa de vacunación en el rebaño avícola y tomar medidas de bioseguridad, como mantener una buena higiene en el gallinero, controlar los insectos vectores y evitar la introducción de aves infectadas.

   La coriza infecciosa 

   También conocida como moquillo aviar, es una enfermedad respiratoria altamente contagiosa que afecta a las aves de corral, incluyendo gallos y gallinas. Es causada por la bacteria Avibacterium paragallinarum y se caracteriza por la inflamación de los senos nasales y los conductos respiratorios superiores.

   Síntomas de la Coriza infecciosa

   Los síntomas de la coriza infecciosa incluyen estornudos frecuentes, secreción nasal y ocular, hinchazón de la cara y cabeza, dificultad para respirar, pérdida de apetito y disminución en la producción de huevos. Las aves afectadas pueden mostrar un estado general decaído y presentar el plumaje desalinizado.

   Transmisión de la Coriza Infecciosa

   La coriza infecciosa se transmite principalmente a través del contacto directo con aves infectadas, así como por medio de objetos contaminados, insectos y aves silvestres. Es importante implementar medidas de bioseguridad adecuadas, como mantener un ambiente limpio y desinfectado, evitar el contacto con aves silvestres y separar a las aves enfermas de las sanas.

   Tratamiento de la Coriza Infecciosa

   El tratamiento de la coriza infecciosa generalmente implica el uso de antibióticos específicos prescritos por un veterinario. Sin embargo, es importante tener en cuenta que algunas cepas de la bacteria pueden ser resistentes a ciertos antibióticos, por lo que es fundamental seguir las indicaciones del profesional veterinario.

   La prevención de la coriza infecciosa se puede lograr mediante la vacunación adecuada de las aves, el mantenimiento de una buena higiene y el control de los factores de estrés en el entorno de las aves.

    La coccidiosis 

   Es una enfermedad parasitaria común que afecta a las aves, incluyendo gallos y gallinas. Es causado por protozoos del género Eimeria, que se encuentran en el suelo y pueden infectar a las aves a través de la ingestión de ooquistes (huevos del parásito) presentes en el entorno.

   Síntomas de la Coccidiosis

   La coccidiosis puede afectar el tracto digestivo de las aves, especialmente el intestino delgado. Los síntomas pueden variar según la gravedad de la infección, la edad de las aves y la especie de Eimeria involucrada. Algunos de los signos más comunes incluyen diarrea, pérdida de apetito, disminución en el crecimiento y desarrollo, debilidad, plumaje desalinizado y anemia.

   Tratamiento de la Coccidiosis

El tratamiento de la coccidiosis puede incluir el uso de medicamentos antiprotozoarios específicos prescritos por un veterinario. Además, es importante implementar medidas preventivas para controlar la propagación y el impacto de la enfermedad. Estas medidas incluyen mantener un ambiente limpio y seco, proporcionar agua y alimento de buena calidad, evitar la sobreexposición a oquistes y practicar una higiene y bioseguridad.

   La prevención de la coccidiosis se puede lograr mediante la vacunación de las aves jóvenes, el uso de alimentos y agua tratados con medicamentos anticoccidiales y el control del acceso de aves silvestres y roedores al área de cría.

   Es importante tener en cuenta que la coccidiosis puede ser recurrente y que algunas cepas de Eimeria pueden desarrollar resistencia a ciertos medicamentos. Por lo tanto, es fundamental trabajar en estrecha colaboración con un veterinario aviar para implementar un programa de prevención y control adecuado en el rebaño avícola.

   Enfermedad de Newcastle

   La enfermedad de Newcastle, también conocida como paramixovirus aviar, es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta a una amplia variedad de aves, incluyendo gallos y gallinas. Es causado por el virus de la enfermedad de Newcastle (NDV por sus siglas en inglés), que puede ser transportado por aves silvestres y transmitido a las aves domésticas.

   Síntomas de la enfermedad de Neucastle

   La enfermedad de Newcastle puede presentarse en diferentes formas, desde leves hasta graves, y puede afectar el sistema respiratorio, el sistema nervioso y otros órganos internos de las aves. Los síntomas pueden variar y depender de la virulencia de la cepa del virus y de la especie de ave afectada. Algunos de los signos más comunes incluyen dificultad para respirar, estornudos, tos, diarrea, pérdida de apetito, debilidad, letargo, temblores musculares, torceduras de cuello y muerte súbita.

   La enfermedad de Newcastle se propaga principalmente a través del contacto directo con secreciones respiratorias y excreciones de aves infectadas. También puede transmitirse indirectamente a través de equipos, alimentos, agua y ropa contaminados.

   El control de la enfermedad de Newcastle se basa en medidas de bioseguridad rigurosas, como la cuarentena de nuevas aves, la limpieza y desinfección regular de las instalaciones, el control de vectores (como aves silvestres y roedores), la vacunación y la vigilancia activa.

   Es importante destacar que la enfermedad de Newcastle es una enfermedad de notificación obligatoria en muchos países. Esto significa que cualquier sospecha o confirmación de la enfermedad debe ser reportada a las autoridades veterinarias locales para tomar las medidas adecuadas de control y erradicación.

   La enfermedad de Marek 

   Es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta a las aves, incluyendo gallos y gallinas. Es causado por el virus del herpesvirus aviar serotipo 1 (MDV-1). La enfermedad de Marek se caracteriza por afectar el sistema nervioso, los órganos internos y el sistema inmunológico de las aves.

   Síntomas de la enfermedad de Marek

   Los síntomas de la enfermedad de Marek pueden variar y depender de la cepa del virus y de la edad de las aves afectadas. Algunos de los signos más comunes incluyen parálisis de las patas, alas o cuello, pérdida de peso, debilidad generalizada, cambios en el comportamiento, disminución de la producción de huevos y aumento de la mortalidad.

   Transmisión de la enfermedad de Marek

   El virus de la enfermedad de Marek se transmite principalmente por inhalación de partículas virales presentes en el ambiente contaminado, como el polvo y las plumas. También puede transmitirse verticalmente de una generación a otra a través del huevo.

   Tratamiento de la enfermedad de Marek

   No existe un tratamiento especifico para la enfermedad de Marek. Sin embargo, la prevención es fundamental para controlar la propagación de la enfermedad. Se recomienda la vacunación de las aves jóvenes con vacunas vivas o atenuadas, que ofrecen protección contra las cepas más virulentas del virus. Además, se deben implementar medidas de bioseguridad, como la limpieza y desinfección regular de las instalaciones, el control de vectores y la separación de aves sanas y enfermas.

   Es importante destacar que la enfermedad de Marek puede tener un impacto significativo en la industria avícola, ya que puede causar pérdidas económicas debido a la mortalidad y la disminución de la producción. Por lo tanto, es trabajar esencial en estrecha colaboración con veterinarios especializados en aves para implementar estrategias de prevención y control.

   Como siempre decimos, esperamos que toda esta información pueda serte útil algún día.

   Saludos desde Marchena-Sevilla-Andalucía.